En noviembre de 1992, los grandes científicos del momento crearon un documento muy importante con respecto a la administración y gobierno de la Tierra y la vida en ella.
Este documento fue firmado por alrededor 1,700 científicos incluyendo a la mayoría de los premios nobel en ciencia que en ese entonces se encontraban activos. En el documento se indica que los seres humanos se encuentran en un curso catastrófico que podrá crear daños irreparables al medio ambiente.
Continúan mencionando en esta carta a la humanidad, que la atmósfera está perdiendo la capa de ozono que protege la vida en la tierra al evitar que los rayos ultravioleta afecten y destruyan toda vida en la Tierra. Las fuentes de agua subterráneas están agotándose y eso creará una gran presión en la producción de alimentos. La contaminación de los ríos y lagos limitan el abastecimiento de agua todavía más. Los océanos se encuentran ya con signos de alta contaminación y las pesquerías se encuentran en su límite de explotación algunas ya en declive con riesgo de colapso. Asi sigue el documento con lo que se refiere a los suelos, bosques, especies vivientes, la población humana.
La advertencia. Los abajo firmantes, miembros de alto rango de la comunidad científica mundial, por este medio advierten a toda la humanidad de lo que se avecina. Se requiere un gran cabio en el gobierno de la Tierra y la vida en ella, si se quiere evitar una enorme miseria humana así como la mutilación irremediable de nuestro hogar en el planeta.
Este grupo de científico identifica 5 grandes áreas en las que se debe actuar simultáneamente y de inmediato.
1. Debemos controlar las actividades que se encuentran dañando al medio ambiente
2. Se deben administrar los recursos que son cruciales para el bienestar de la humanidad de manera efectiva
3. Se debe estabilizar la población humana
4. Se debe reducir la pobreza y eventualmente eliminarla
5. Se debe asegurar la equidad de género.
Se necesita una nueva ética humana con respecto al hecho de descargar nuestra responsabilidad de cuidarnos y cuidar la Tierra. Debemos reconocer la capacidad limitada de la Tierra de proporcionar lo necesario para nuestra existencia. Después de todo no tenemos otro Planeta.
Para ello, hay que cambiar primero de forma individual. Pensar que sí importa cuando NO hacemos nada al respecto.
ResponderEliminarLa pobreza nos va a terminar afectando a todos, y el credimiento indiscriminado de la población, con una responsabilidad individual difusa y diluida.
Primero habrá que fortalecer el YO interior, asegurar que somos realmente fuertes y espiritualmente superiores cuando hacemos algo por los demás, y cuando migramos nuestra atención de la autocompasión y de la autoimportancia, a los verdaderos objetivos que nuestro corazón manda.
Fuerte abrazo.